“LAS ENFERMEDADES DE LA MENTE SON INVISIBLES Y A MENUDO INCOMPRENDIDAS."
La acupuntura las reconoce como desajustes en el fluir de la energía, y cada aguja busca devolver el equilibrio y la luz al cuerpo y a la mente.
La MENTE mueve energía.
(Principio y fin son uno en su vacío. De ella todo brota, y en ella todo se disuelve.)
El que solo piensa, se aleja del sentir.
El que solo analiza, se pierde en la forma.
Escucha el cuerpo.
Él no habla con palabras, pero sabe.
La calma no se busca.
Se permite.
Sanar no es vencer al síntoma.
Es dejar de huir.
Es ver lo que duele sin juzgarlo.
Y habitar lo que somos sin dividirnos entre mente, cuerpo y espíritu.
Cuando uno se detiene, el equilibrio encuentra su camino.
Cada ser es un pequeño Universo.
El cielo y la tierra respiran en él.
Lo invisible sostiene lo visible.
Y la fuerza que da vida también la restaura.
No hay nada que forzar.
Solo permitir que el Qi vuelva a fluir.
“Por eso cuando cultivamos la energía, lo innato se revela y la sanación ocurre sin esfuerzo.”
Cada paso cuenta, todo cambio comienza con una decisión.
AQUÍ ENCONTRARÁS UN ESPACIO SEGURO PARA TI.
He tenido la suerte de que la vida pusiera en mi camino a Ana. Desde la primera sesión me transmitió mucha confianza y calidez humana. Se nota su gran profesionalidad y la pasión que pone en lo que hace. Siempre me escucha con atención y me acompaña con cercanía. Gracias a Ana me siento más en equilibrio. La recomiendo sin dudar. Una profesional cálida, humana y profundamente comprometida con el bienestar de sus pacientes.
Acudí a Ana por ansiedad, depresión y un herpes zóster en la cara. Nunca había probado la acupuntura ni sabía que la Medicina Tradicional China podía tratar tantas afecciones. Conocer a Ana ha sido uno de los mayores regalos que me ha dado la vida, justo cuando más lo necesitaba. En la primera sesión estaba nerviosa por la incertidumbre y por si las agujas dolerían, pero después solo tenía ganas de volver. Ahora, tras cinco sesiones, me siento mucho mejor. Mis pensamientos y obsesiones han disminuido notablemente, duermo mejor e incluso puedo descansar la siesta, algo que antes me era imposible.
Ana, desde el primer día confié en ti. Eres una gran profesional. Muchas gracias por tu cercanía, tu comprensión y tanto cariño.
Tuve una experiencia maravillosa en la consulta de acupuntura con Ana. Es una persona muy cariñosa y cercana, que desde el primer momento me hizo sentir cómoda y en confianza. La atención que brinda es excepcional y se nota su dedicación. Gracias a sus tratamientos me siento mucho mejor. Sin duda la recomiendo a quienes busquen un enfoque cálido y profesional. Gracias, Ana, por tu maravillosa atención.