MICOTERAPIA
Aunque en Occidente la micoterapia pueda parecer una herramienta innovadora para el bienestar, su uso se remonta a miles de años en la Medicina Tradicional China, específicamente desde la dinastía Han (206 a.C. - 220 d.C.).
Durante este periodo, los hongos medicinales fueron reconocidos no solo como alimentos, sino también como poderosos remedios terapéuticos que favorecían la salud y la longevidad. Estos hongos eran considerados esenciales para fortalecer el Qi, reforzar el sistema inmunológico y equilibrar las funciones del organismo.
Desde la Medicina China, estas acciones se corresponden con su capacidad de reforzar el Wei Qi (energía defensiva), tonificar el Qi y la Sangre, nutrir el Yin y equilibrar los Zang-Fu, apoyando la vitalidad y el equilibrio interno.
Se caracterizan por su riqueza en compuestos "bioactivos". Estos no son nutrientes básicos como vitaminas, minerales o proteínas, sino sustancias con la capacidad de modular positivamente diversas funciones del organismo. Además, muchos presentan propiedades adaptógenas, ayudando al cuerpo a mantener su equilibrio natural y a adaptarse mejor a factores estresantes, tanto físicos como emocionales.